Tanto los factores internos como externos hacen que nuestra piel pierda su vitalidad, tales como la contaminación ambiental, el tabaco o el estrés. Si no cuidamos nuestra piel, haremos que se deteriore más rápido y perderemos su aspecto joven. Si después del día hemos sudado más de lo habitual y notamos que nuestra piel tiene más sebo o puntos negros, podremos ver cómo nuestro rostro está más sucio. Puedes aplicar un contorno de ojos y bálsamo labial para mantener estas áreas hidratadas. Si buscas un efecto antioxidante e iluminador, la mascarilla de Endocare Radiance Peel Mask es genial.
Limpieza Facial En Casa: Eliminar Los Puntos Negros, Paso A Paso
- Así pues, cuando se llena la piel de agua, permiten que las células se desarrollen en un medio mejor y sufran menos, y sobre todo, proveen del agua perdida con la edad.
- Una piel seca o madura, o ambas cosas también deberá realizarse más asiduamente la limpieza, por ejemplo, cada seis semanas, sí, como habéis leído.
- La superficie cutánea está continuamente expuesta a factores externos que pueden alterar su aspecto y provocar imperfecciones, tono apagado, textura irregular o envejecimiento prematuro.
- Mezcla bien todo otra vez y aplícalo por todo el rostro, dejándolo actuar 20 minutos.
La buena noticia es que con una buena limpieza de cutis casera una vez al mes volverás a llevar la salud, luminosidad y rejuvenecimiento a tu rostro. Si eres fumador el humo obstruye los poros y la nicotina da un color cetrino a la dermis. Debes aumentar la frecuencia de las limpiezas de cutis y aplicar cremas antioxidantes al rostro y cuello. Todas ellas complementan a los principios activos más importantes en cuanto a las cremas hidratantes se refiere y que son el ácido hialurónico, el lactato o la urea.
Paso A Paso Para Hacerte Una Limpieza Facial En Profundidad En Casa
No somos partidarios de utilizar productos muy fuertes en la piel, ya que a veces tendemos a usarlos en exceso y pueden llegar a dañarla o irritarla. Por ello te damos dos opciones de gel exfoliante facial, uno mas fuerte y otro algo más suave. Ambos limpiadores faciales son perfectos para una limpieza de cutis. Es el último paso de cualquier limpieza de cutis y no debes olvidarlo jamás.
Al terminar retira el producto con abundante agua y sécate con una toalla limpia. Limpia tu rostro en profundidad y prepáralo para los pasos que vienen a continuación. Para ello, utiliza un gel limpiador y aplícalo con agua tibia realizando movimientos circulares por todo el rostro, cuello y escote.
Recuerda siempre que la elección debe hacerse en torno a cómo sea tu piel (grasa, mixta, seca o normal) y hacer una prueba para prevenir reacciones adversas. A continuación, te mostramos paso a paso cómo limpiar tu piel en profundidad y los productos cosméticos más adecuados según tu tipo de piel. La limpieza de cutis casera es una forma de rejuvenecer la piel y que podrás realizar una vez al mes. Los expertos recomiendan aún así ir al menos una vez al año a un centro de belleza para hacerla de forma profesional.
Si deseas leer más artículos parecidos a Cómo hacer una limpieza de cutis en casa, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Belleza y Cuidado Personal. Lo más importante es que el limpiador que utilices sea lo menos agresivo posible y acorde a tu tipo de piel. En el caso de que la mascarilla requiera de aclarado, debe aplicarse antes del tónico. Sin embargo, existen mascarillas que se pueden dejar actuar durante la noche, como anti-stress masks o hydravital mask.
Sacamos los indeseados puntos negros sin dañar la piel, con mimo, cuidado y pericia. Es importante hacer hincapié en el maquillaje de los ojos, que suele ser el más resistente, y también el que cubre el rostro para que los poros estén limpios. No obstante, antes de iniciar el tratamiento es necesario que te vea un profesional para que pueda asesorarte, ya que, por ejemplo, en procesos con acné puede agravarlo y dañar nuestra piel. Del mismo modo, no se recomienda hacer limpiezas cuando nuestra piel ha estado expuesta recientemente al sol.
Sobre la piel se posan partículas de suciedad a lo largo del día y de la noche, por lo que una limpieza con los productos adecuados es recomendable en cualquier caso. Podemos limpiar nuestra piel con un desmaquillante de base oleosa, que elimina impurezas, sebo y restos de maquillaje, y, después, con un gel o espuma que nos ayude a retirar células muertas e impurezas acuosas. El sérum se absorbe más rápido y hace que los ingredientes activos penetren en profundidad, mientras que la crema es el tratamiento en sí con el que la piel estará protegida, tanto de noche, como durante la jornada. Terminaríamos con nuestra crema recurring y, en su caso con protector photo voltaic.
Después de limpiar el cutis debes aplicar el tónico con un algodón o con tus propios dedos. Este producto consigue eliminar las impurezas que no hayan podido ser eliminadas con los pasos anteriores. Las rutinas de limpieza se han popularizado mucho en los últimos tiempos.
También son populares las de carbón (mascarillas negras) por sus efectos purificantes. Eso sí, hemos de tener en cuenta que las mascarillas faciales que usamos en casa para limpiar los puntos negros no resultan tan eficaces como las que se aplican en los centros estéticos. Y es que su acción es más superficial, por lo que, aunque visiblemente parezcan efectivas, a niveles más profundos no lo son tanto. – Aguas micelares, ideales para la limpieza de rostros sensibles al ultimate del día (con o sin maquillaje). Permiten eliminar las impurezas y regular el sebo sin resecar la piel. Con extracto de miel y aceite de almendras natural, esta mascarilla facial de Nivea nutre intensamente para una piel suave y aterciopelada.
Solo los profesionales, en centros estéticos cualificados, son capaces de manipular estos puntos negros sin causar problemas en el cutis. Aunque, si necesitamos hacernos una de estas limpiezas en casa, estos serían los pasos a seguir. Los puntos negros son la pesadilla de algunas mujeres, que cada día luchan contra la tentación de pellizcarse el rostro para hacerlos desaparecer. Esos poros obstruidos, que son propios de las pieles mixtas y grasas, no son más que comedones o dilataciones del folículo piloso que se forman por la acumulación de sebo o queratina.